El subsecretario del Patrimonio Cultural, Emilio de la Cerda, junto al secretario técnico del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), Erwin Brevis, se refirieron a los pasos a seguir respecto a los monumentos nacionales afectados desde el inicio del estallido social y, en particular, a la situación del monumento público al General Manuel Baquedano, ubicado en la comuna de Providencia, que el pasado 31 de diciembre sufrió un intento de derribamiento.

“Hoy día claramente, sobre todo después del intento de botar el monumento, el escenario es distinto y más complejo que hace dos semanas y obliga a tomar nuevas acciones por parte al Consejo de Monumentos Nacionales que analizará y resolverá para este caso en su sesión plenaria de este miércoles 8 de enero. Aunque los informes estructurales dicen que este monumento se encuentra estable, este tipo de actos representan un riesgo muy grande; tenemos un monumento que pesa una tonelada, que eventualmente puede ceder y podría afectar muy seriamente a las personas, además de la dimensión simbólica del bien cultural”, señaló el subsecretario.

La autoridad agregó que “en atención a todos estos antecedentes, hemos solicitado al Consejo de Defensa del Estado que en los próximos días presente una querella por el caso específico del monumento a Baquedano, que se va a sumar a otras acciones legales que ya están siendo emprendidas por daños a monumentos nacionales”

“Como Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio hemos sido enfáticos en señalar que el patrimonio cultural es dinámico. Cada generación puede someter a revisiones, a debate o a nuevas miradas los bienes simbólicos, pero esa acción se debe hacer por la vía de un diálogo tolerante y respetuoso de la institucionalidad vigente, y no a través de la violencia o la coerción de grupos que se autoasignan la representación de la sociedad para determinar su legitimidad, validez o importancia simbólica. Por ello rechazamos cualquier tipo de daño ejercido sobre los bienes públicos, que son parte del alma, de la memoria y la historia de la sociedad”, detalló.

Desde el primer día del estallido social, el ministerio y su institucionalidad patrimonial se han desplegado en terreno realizando acciones y gestiones concretas respecto a las alteraciones y daños al patrimonio. Registros, coordinaciones intersectoriales, acciones de emergencia, y directrices sobre cómo realizar las primeras limpiezas o retirar de manera adecuada monumentos públicos, en el caso de derribamiento, o si se considera necesario para la seguridad de la ciudadanía y del bien.

“Eso es lo que nos permite saber hoy que tenemos 230 monumentos nacionales con algún nivel de daño o alteración a lo largo de todo Chile y estamos realizando catastros más acabados para estimar costos precisos para la recuperación y gestionar vías de financiamiento para apoyar este proceso”, detalló el subsecretario.

El Secretario Técnico del CMN, detalló por su parte, que la situación del monumento a Baquedano se ha monitoreado desde el primer día, en coordinación con la municipalidad y otros actores, y se han realizado visitas técnicas e informes estructurales del MOP y el Centro Nacional de Conservación y Restauración respecto al bien patrimonial en las que se utilizaron tecnologías como el uso de un scanner.

Además especificó que en la sesión del 8 de enero se analizarán todos los antecedentes y posibles cursos de acción.

“Hay distintas alternativas: el retiro preventivo, para poder resguardar no solo el monumento sino prevenir los riesgos de un posible volcamiento sobre las personas; otra opción sería mantenerlo con un posible refuerzo de su anclaje, debido a que si bien está estable en cargas estáticas y ante eventos sísmicos, sí existe un riesgo real de volcamiento si persisten intentos por derribarlo”, sostuvo.