Este miércoles se realizaron los funerales de Sergio Catalán, el arriendo chileno que encontró a sobrevivientes de la llamada “Tragedia de Los Andes” ocurrida el 13 de octubre de 1972.

Sergio Catalán falleció el lunes en San Fernando, en la localidad de Roma, a los 91 años, realizándose su despedida en la capilla San Rafael, con la presencia de Gustavo Zerbino, quien fue un sobreviviente del también denominado “Milagro de Los Andes”.

“Sergio Catalán estaba en el lugar indicado, en el momento indicado. Como ser humano íntegro cumplió con su valor (…) A mí él me dijo que él había actuado como hombre, como padre y como cristiano (…) para nosotros sigue siendo un padre”, expresó a 24 Horas Zerbino.

En la despedida, Zerbino sostuvo que “nos ha dejado un hombre que va a permanecer con nosotros para el resto de nuestras vidas (…) un hombre que con su coraje salvó a nuestros hermanos, gracias don Sergio, usted es parte de nuestra historia y nuestro presente”.

El accidente del vuelo 571 de la Fuerza Aérea uruguaya ocurrió cuando el avión militar con 40 pasajeros y cinco tripulantes que conducía al equipo de rugby Old Christians, se estrelló en un risco de la cordillera de Los Andes en Mendoza (Argentina), en ruta hacia Santiago de Chile.

De las 45 personas en el avión, 13 fallecieron en el accidente o poco después (entre ellos cuatro de los cinco miembros de la tripulación); otros cuatro habían fallecido a la mañana siguiente, y el octavo día murió la pasajera Susana Parrado debido a sus lesiones.

Los 27 restantes tuvieron que enfrentarse a duras condiciones ambientales (-25 a -42 °C) de supervivencia en las montañas congeladas. El 12 de diciembre de 1972, Nando Parrado, Roberto Canessa y Antonio Vizintín parten en busca de ayuda. Habiendo caminado unos 59 km aproximadamente, llega Parrado y Canessa a la precordillera de San Fernando, al sector de Los Maitenes.

“Cuando yo los vi iba a juntar el ganado, y me hacían con las manos, no entendía lo que me decían, corrían y se caían”, explicaba a TVN en diciembre de 1972 el arriero que los encontró: Sergio Hilario Catalán Martínez, de 44 años entonces, quien se dirigió al retén de Puente Negro a cargo de Carabineros para pedir ayuda, lo que valió el rescate de los 16 sobrevivientes del vuelo.