La Pontificia Universidad Católica informó este sábado que decidió suspender las clases presenciales a partir del lunes 16 de marzo como medida de protección ante el avance del Coronavirus.

“El Ministerio de Salud nos ha confirmado que estamos en una fase 3 (que los casos infectados no son trazables), y el número de casos diarios se ha incrementado de manera muy significativa, y nuestros especialistas de salud pública e infectología piensan que la situación continuará deteriorándose”, explicó en un comunicado.

De esta manera, la PUC sostuvo que “en las circunstancias descritas se ha decidido suspender las clases presenciales en todas las facultades en pregrado, postgrado y educación continua a partir del lunes 16 de marzo y hasta que tengamos nueva información, dejando la libertad a cada unidad académica para evaluar la continuidad de actividades prácticas de grupos pequeños”.

Además con el fin de enfrentar la suspensión de clases presenciales se han estado preparando para que los cursos se dicten en formato online en los mismos horarios establecidos en la programación académica.

“Durante los últimos días se ha trabajado intensamente de forma que hoy todos los cursos programados para este semestre están en la plataforma CANVAS, la cual tiene herramientas que permiten la entrega de clases a distancia. En relación con las evaluaciones, se solicita que estas se suspendan al menos por las próximas dos semanas”, agregó.

Asimismo precisó que se está preparando “un plan específico para apoyar a aquellos estudiantes que no tienen acceso a un computador e internet. Sabemos que no todas las actividades académicas pueden realizarse en formato online, por lo cual invitamos a aquellas unidades académicas que presenten esa situación a trabajar en conjunto para buscar formas de resolverlas”.

Con respecto a los profesionales y administrativos, “en este especial momento necesitamos contar con la colaboración de todos los funcionarios de nuestra Universidad para organizar el trabajo y, de esta manera, poder asegurar la continuidad de funcionamiento institucional”.

“Es importante recalcar que durante la semana comprendida entre el 16 y el 20 de marzo las unidades académicas y administrativas deben organizarse y planificar el trabajo que, eventualmente y de acuerdo al avance del Coronavirus, pudiese ser realizado a distancia. Con este objeto, es fundamental asistir a sus trabajos durante estos días, de manera presencial, en horario normal, en todos los campus, hasta que la situación requiera de nuevas medidas”, añadió.

Detallando que quedarán eximidos de asistencia los funcionarios mayores de 65 años, embarazadas y personas con enfermedades crónicas o inmunodeprimidos. Asimismo, se reorganizará el trabajo con empresas externas de seguridad, aseo y jardines de manera de extender estas indicaciones en los días siguientes.

“El trabajo conjunto, la comprensión y el diálogo permanente de toda la comunidad universitaria será clave para superar entre todos esta situación”, concluyó.