Cruz Roja hace urgente llamado a incrementar donación de sangre
En el marco del Día Mundial del Donante de Sangre que se celebrará el próximo 14 de junio, Cruz Roja Chilena lanzó la campaña #TuSangreMeDaVida, cuyo propósito es crear conciencia en la ciudadanía de la urgente necesidad de dadores altruistas de sangre en el país, considerando que se necesitan 20 cada mil habitantes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y únicamente hay 14 en Chile.
“Nuestro objetivo es prevenir y aliviar el sufrimiento humano, y es por este motivo que buscamos ayudar a la población a entender que se requiere una reserva permanente de sangre segura, que permita responder oportunamente a las necesidades diarias del país, lo que se puede lograr incrementando el número de dadores altruistas en al menos 20 cada mil habitantes. Por esta razón, hacemos un urgente llamado a concurrir a los bancos públicos y privados más cercanos, y comprometerse con esta causa de manera permanente”, afirmó Nicolás Torres Cortés, director nacional de Salud de la Cruz Roja Chilena.
Se estima que la sangre de un dador (450 cc) puede ayudar a cuatro personas y a nueves recién nacidos a prolongar su vida, a través de diferentes procedimientos. Además, los glóbulos rojos extraídos se recuperan en 15 días y si se cumple con los requisitos se puede volver a donar cada tres a cuatro meses: tener entre 18 y 65 años, pesar sobre 50 kilos, no estar embarazada, haberse alimentado bien, no haber consumido alcohol ni drogas, no ser insulinodenpendiente ni portador de infecciones como la hepatitis B o C, el VIH/SIDA o la enfermedad de Chagas.
Según el Centro Metropolitano de Sangre (CMS), cada una hora, 20 pacientes requieren una transfusión de sangre en los hospitales públicos; nueve de cada diez chilenos la necesitará alguna vez en su vida y solamente el 18% de la población es donante en Chile. En este contexto, Rosario Sau, primera vicepresidenta nacional de la Cruz Roja Chilena y encargada del Programa de Sangre Segura de la institución humanitaria enfatizó: “Debemos trabajar mancomunadamente con el sector público y privado, motivando a las nuevas generaciones y a quienes cumplen actualmente con los requisitos, a convertirnos en donantes voluntarios de sangre y revertir así la crítica situación por la que atraviesa nuestro país. Son muchos los que dependen de nosotros para prolongar su vida”.