La delegada presidencial para la emergencia por Covid-19 en la región de Coquimbo, Andrea Balladares, se sumó a los operativos y controles que realizan el Ejército, Carabineros y PDI durante el toque de queda que rige entre 22.00 y 05.00 horas.

La medida se efectúa cada jornada como una forma de disminuir el número de infractores a esta disposición sanitaria de carácter obligatorio, que tiene como objetivo reducir el desplazamiento de personas y, así, mermar la propagación del virus.

Tras los operativos, la delegada Balladares señaló que “estamos haciendo el control y fiscalización del toque de queda, con el fin de que todas las personas cumplan con esta restricción de tipo sanitaria que forma parte de una serie de medidas y dictámenes que lo único que buscan es restringir el avance de la pandemia. Hemos hecho un recorrido por Coquimbo y La Serena, revisando los puntos de control y patrullajes que hacen las fuerzas de seguridad”, comentó la delegada Balladares.

Durante el recorrido, participó también el intendente (s), Gonzalo Chacón, quien destacó que desde que comenzó la medida, más de 5.000 personas han sido detenidas por incumplimiento de la restricción de desplazamiento. “Si los vecinos no toman conciencia es difícil que le ganemos a esta pandemia. Tomemos todas las recomendaciones, usemos la mascarilla y el distanciamiento social. Esa es la clave para ganarle”, indicó la autoridad.

Por su parte, el general Pablo Onetto, jefe de la Defensa Nacional en la región de Coquimbo, precisó que “hacemos un tremendo trabajo todos los días planificando nuestras salidas para estar en todos los lugares que sea necesario, respondiendo a la realidad que está viviendo La Serena, Coquimbo y toda la región. Es por eso que invitamos a la delegada y el gobernador un día sábado, que sabemos son especiales para controlar el toque de queda, para que vean el cumplimento de esta y como estamos trabajando en estos más de 90 días que llevamos, para poder ganarle a la pandemia”.