Con un minuto de silencio, la sala del Senado se sumó a las muestras de respeto y solidaridad mundial tras la potente explosión que sacudió este martes, el puerto de Beirut, en el Líbano, dejando decenas de fallecidos y centenares de heridos.

Al inicio de la sesión ordinaria, la mesa solicitó a la sala rendir este homenaje en señal de condolencias hacia esa nación de medio oriente que ha recibido numerosas muestras de solidaridad, dada la magnitud de la tragedia, hasta ahora con consecuencias indeterminadas.

La explosión fue registrada por numerosos testigos que han compartido, en redes sociales, las conmovedoras imágenes de una descomunal detonación en el sector del puerto de Beirut.

La onda expansiva derrumbó edificios y provocó daños generalizados, al punto de dejar atrapadas a numerosas víctimas entre los escombros.

Las primeras versiones atribuyen la magnitud de la tragedia a una gran cantidad de explosivos almacenados durante años, en dicho sector.