Conductores de la locomoción colectiva mayor han bajado sus ingresos en un 90%
Una dramática situación están viviendo los conductores de locomoción colectiva mayor de todo el país, a raíz del coronavirus. Luis Núñez, vocero nacional de la Coordinadora de Conductores del Transporte Público de Chile, explica que “desde el 18 de octubre, con el estallido social, nuestros ingresos bajaron de forma preocupante, pero en marzo, con el inicio de la pandemia del Covid 19, fue que nuestras familias comenzaron a sufrir la falta de servicios básicos”.
Como el sueldo de los conductores de locomoción colectiva corresponde a un porcentaje de lo obtenido por boleto cortado, hoy estos han disminuido de forma considerable. “Nuestros ingresos bajaron en un 90%, ya que a nosotros no se nos paga sueldo fijo. Actualmente si no hay pasajeros nuestras familias no se pueden alimentar”, señala Núñez. “Si antes un conductor ganaba cerca de 30 mil pesos diarios, hoy está sacando entre 3 y 5 mil pesos”, indica Hugo Arce, vicepresidente de la Federación de Conductores de Valparaíso.
Esta realidad es extensiva en prácticamente todas las ciudades del país que se han visto afectadas por la pandemia. “Desde hace muchos años, el rubro de la locomoción colectiva mayor ha sido un sistema de trabajo donde el conductor genera sus propios ingresos, debido a que su remuneración es cien por ciento a comisión o, para decirlo de otra forma, por boleto cortado. Se ha aprovechado esta instancia para evadir el pago de un sueldo base. Si el conductor no trabaja no genera ingresos para él”, puntualiza Celin Castaing, Tesorero de la Federación Regional de Conductores de Temuco.
“Somos los únicos trabajadores que a pesar de tener una baja del 90% de nuestros sueldos, seguimos trabajando y transportando a miles de compatriotas que por obligación tienen que seguir asistiendo a sus lugares de trabajo”, complementa Núñez.
Sin beneficios
Pese a la considerable baja en sus ingresos, los conductores no han sido incluidos en ninguno de los beneficios que ha entregado el Estado. “El gobierno nos ha dejado de lado. No hemos encajado en ningún tipo de bono”, asegura Jaime Zamora, secretario del Sindicato Interempresa Comunal de Chiguayante y dirigente regional de la Federación Unitaria de Trabajadores del Transporte.
“No recibimos el bono Covid, no calificamos para el primer Ingreso Familiar de Emergencia, tampoco calificamos para el IFE 2.0 y tampoco pudimos recibir el anunciado bono de 500 mil pesos para la clase media”, afirma, en tanto, Núñez. “Para algunos beneficios ganamos mucho y para otros muy poco”, agrega.
Una de los grandes problemas se debe a que a los conductores se les impone por el mínimo. “Ya que nunca se ha fiscalizado en cuanto a imposiciones, el conductor gana más o menos entre 600 y 800 mil pesos mensuales, pero se le impone siempre por el mínimo. Si a nosotros se nos hubiese impuesto siempre por el sueldo que corresponde, no tendríamos que estar pasando estas humillaciones de estar pidiéndole a todas las autoridades que se nos tome en cuenta”, explica el vicepresidente de la Federación de Conductores de Valparaíso, Hugo Arce.
Llamado al gobierno
Actualmente el gobierno, a través del ministerio de Hacienda, se encuentra trabajando en un beneficio especial para el rubro de transporte, el cual estaría enfocado principalmente en los dueños de las máquinas.
Al respecto, Luis Núñez indica que “se ha invitado a los empresarios a una mesa de trabajo con el ministerio de Hacienda, empresarios de la locomoción colectiva menor con los cuales se están llegando a acuerdos de supuestos bonos y beneficios. Lamentablemente los representantes de los trabajadores del transporte público mayor no han sido invitados, han sido marginados y nuevamente vemos con mucha pena que las miles de familias de los conductores a nivel nacional una vez más van a ser postergadas”.
La diputada de Comunes, Claudia Mix, se reunió ayer con la Coordinadora de Conductores del Transporte Público de Chile, que agrupa a federaciones y sindicatos de las regiones de Tarapacá, Antofagasta, Coquimbo, Valparaíso, Bío Bío, La Araucanía, Puerto Montt y la provincia de Talagante, con el objetivo de evaluar una fórmula para que sean incluidos en el proyecto.
Por eso, la parlamentaria llama al Ejecutivo a que no se olvide de ellos. “Emplazamos al gobierno, al ministro de Hacienda y a la ministra del Trabajo, a que no abandonen a los conductores de la locomoción colectiva. No pueden preocuparse sólo de los empresarios dueños de los transportes y excluir a los chóferes, como ha ocurrido con ellos en todos los otros beneficios entregados por el Estado. La situación que viven es dramática y necesitan una solución ahora”, señala Mix.
“Hoy día el gobierno nos ofrece 350 mil pesos de una sola vez, en la cual todos los voceros y los dirigentes del país, sindicatos bases, encontramos que es poco. Necesitamos que esta ayuda, este sueldo de emergencia para los conductores, sea mínimo por lo menos 3 meses”, afirma, por su parte, Jaime Zamora. “Es realmente necesario colocar en práctica una ley que proteja a los conductores de todo el país, y así asegurar un buen pasar para ellos y sus familias”, manifiesta Celin Castaing.
“Exigimos al gobierno un sueldo de emergencia de por lo menos 450 mil pesos y la posibilidad de acceder a un préstamo solidario, igual que lo que hicieron con la clase media. Somos trabajadores, somos chilenos, somos parte importante de la producción de este país, por lo tanto, creemos que no merecemos quedar postergados. Es el clamor de trabajadores desde Arica a Punta Arenas. No nos abandonen, no dejen de lado a la primera línea de la conectividad”, concluye el vocero nacional de la Coordinadora de Conductores del Transporte Público de Chile, Luis Núñez.