El Barça se encomienda a Koeman y a un Messi molesto para recuperar el trono
El FC Barcelona encara la liga española 2020-2021 con más incertidumbre que ilusión, con el objetivo de recuperar el trono perdido de malas formas en la pasada campaña y con un nuevo ciclo, con el ‘héroe’ Ronald Koeman en el banco, pero que se abre con un Lionel Messi enfadado tras no poder abandonar una nave que pareció tocar fondo con Quique Setién.
La pandemia de coronavirus afectó a un Barça que afrontó un cambio de técnico estéril. La directiva de Josep Maria Bartomeu optó por poner fin a los dos años y medio de Ernesto Valverde, que tenía líder al equipo en la Liga, pero al que se acusaba de ofrecer un fútbol cada vez más opaco.
El club apostó por Setién para dar aire nuevo y recuperar el estilo más cercano a Johan Cruyff, pero el cántabro no recondujo la situación y sus deseos se quedaron en palabras. El ambiente también pareció enrarecerse y el proyecto terminó de mal modo, con el título perdido ante el Real Madrid y un más que doloroso adiós en la Champions ante el Bayern y el bochornoso 2-8.
Y del ‘parche’ al héroe de Wembley 1992. El Barça se encomienda a un Ronald Koeman que parece dispuesto a cambiar las cosas en un vestuario que, aunque poco, se va a rejuvenecer, va a decir adiós a algún peso pesado y que finalmente contará con Leo Messi. El ’10’ se quedó a regañadientes, y el neerlandés deberá reconquistarle y convencerle para volver a liderar el proyecto.
El ex central volverá a poner el acento holandés en un fútbol que había perdido brillo, pero también parece que llega dispuesto a usar una mano más dura con unos jugadores acomodados para recuperar el hambre de antaño y dominar como lo lograron con otro ‘cruyffista’ nato como Pep Guardiola.
Guardiola no se reunirá con Leo Messi en el Manchester City, pese a que este parecía ser el destino elegido por el argentino en su amago de marcha. El ’10’ no logró su deseo de salir gratis, pero dejó claro que estaba harto de un Barça sin proyecto y lleno de parches.
Acabada la teleserie, el rosarino volverá a ser el referente obligado para volver a poner al equipo en la pelea por todos los títulos y tras un inusual año en blanco. Sin duda, el máximo goleador de la historia del club, con cada vez más asistencias en su haber, tendrá mucho peso en el porvenir del equipo en esta campaña en la que, sí o sí, se debería dar paso a la cantera si Koeman apuesta por su talento.
ANSU FATI, AHORA O NUNCA
De esas perlas que piden ser pulidas para poder brillar, destaca Ansu Fati. El extremo, que ya ha debutado con la selección española absoluta, es la ilusión del barcelonismo personificada. En él, muchos ven al futuro, al relevo de Messi, con el que espera formar una sociedad parecida a la que formaba con el añorado Neymar.
Cerca de cumplir los 18 años, el hispano-guineano debe tener la confianza y los minutos que le permitan confirmar esos destellos de calidad casi infinita y tanto como extremo como de ‘9’ ha demostrado tener gol y cabida en un equipo que espera, por fin, que Ousmane Dembélé acabe con su calvario y traiga la velocidad y el desborde.
Sin embargo, ambos tendrán la dificultad de hacerse un hueco en un frente ofensivo donde además de la segura presencia de Messi, se perfila la de Griezmann. El gran fichaje del pasado verano ha dejado mucho que desear escorado en la banda izquierda y parece que Koeman le va a poner más centrado para exprimir más sus cualidades.
Además, retorna Philippe Coutinho, con la Champions bajo el brazo y con la confianza, a priori, de Koeman para intentar confirmar su alto coste en un ataque donde parece que la gran baja será Luis Suárez, cuyo caudal de goles, pese a haber descendido el último año, será una tarea complicada de compensar. Memphis Depay podría ser su relevo ante la dificultad de que llegue Lautaro Martínez.
No será el único que se marche ya que ya lo hicieron Ivan Rakitic y Arthur, que pasó de ser el ‘nuevo Xavi’ a no cuajar, y parece que tampoco seguirá Arturo Vidal en un centro del campo donde Koeman podría dar el puesto de ‘5’ a un Frenkie de Jong que tampoco ofreció lo que se atisbaba.
Eso dejaría teóricamente sin sitio a un Sergio Busquets lejos de su mejor forma en un medio donde también vendrá la fuerza del bosnio Miralem Pjanic, fichaje de renombre con mucha experiencia y que aportará también su calidad a balón parado. Atrás, ningún retoque hasta el momento a falta de concretar algún central ante la más que posible salida de Umtiti.
Además, las otras incorporaciones rejuvenecen algo a la plantilla. El extremo Trincao (20 años), el pivote Matheus Fernandes (22) y el extremo zurdo Pedri (17) aseguran juventud, a falta de ver su peso en el equipo, y se unen, aparte de Ansu Fati, a un Riqui Puig, artista del centro del campo y que ya ofreció calidad para consolidarse, y el central Ronald Araujo. También regresan Rafinha, Juan Miranda y Carles Aleñá.
AgenciaUno/EP