Este miércoles se realizó la tercera marcha convocada por los dirigentes, propietarios y trabajadores del comercio minorista de la calle Vivar y del Terminal Agropecuario de Iquique, para exigir que sus negocios puedan abrir tras cuatro meses de cuarentena.

Con banderas negras en manos y con un ataúd que tenía escrito “Pyme”, los manifestantes se movilizaron nuevamente hacia la oficina del Seremi de Salud, lugar donde este lunes entregaron una carta para quejarse por lo que consideran un “trato discriminatorio para más de 3.500 pymes”.

Los representantes de estos locales están protestando por las principales calles de Iquique exigiendo al Gobierno y a las autoridades regionales medidas urgentes debido a que han sido afectados económicamente por la pandemia.

“Esto ya no da para más, levantemos Iquique, levantemos nuestra ciudad. Obviamente con mucha responsabilidad, manteniendo las distancias, todos con máscaras y tratar de despertar, ya que queremos trabajar”, señaló el presidente de la asociación Gremial de Pequeños Empresarios de Iquique (Agpia), Marcos Calcagno, consignó El Sol de Iquique.

En esta oportunidad, los locatarios realizaron un velorio simbólico con un ataúd cubierto de una tela negra en la Catedral de la ciudad, con el fin de mostrar que las pymes están muertas.