Este domingo se entregó el cuerpo de Pedro Cabrera, hombre asesinado por desconocidos luego de ser baleado en el contexto de un nuevo ataque incendiario en Collipulli, región de la Araucanía.

Hoy se realizará el funeral para despedir a este trabajador, donde se hará una breve ceremonia en la Iglesia Metodista Pentecostal para posteriormente llevar sus restos al Cementerio General de la comuna.

La esposa del fallecido, Jeny Flores, señaló que su marido “era un buen padre de familia, yo creo que como él no hay otro hombre (…) por eso nos duele tanto. Yo no se lo doy nadie”.

Además, indicó que en la provincia de Malleco están asustados por lo que podría suceder, “todos tenemos miedo porque no sabemos si vamos a llegar con vida”.

LA CRONOLOGÍA DE LOS HECHOS

Según la multigremial de La Araucanía, un grupo de cerca de ocho sujetos quemó un vehículo para posteriormente herir de bala a la víctima al interior del Fundo Agua Buena, lugar donde se trabaja la construcción de un parque eólico, detalló El Desconcierto.

El hecho habría ocurrido alrededor de las 17:00 horas de este sábado, cuando desconocidos interceptaron un furgón con trabajadores, a quienes obligaron descender para incendiar el vehículo.

Luego, habrían disparado a dos camionetas, en una de las cuales iba Pedro Cabrera, de 49 años, quien trabajaba para la Agrícola La Selva. El herido fue trasladado hasta el Servicio de Urgencia del Hospital de Collipulli, pero dada su gravedad se derivó al Hospital de Angol, donde falleció a minutos de ingresar por el impacto de bala.

FISCALIA HABLA DE ARMAMENTO DE GUERRA

La vocera de la Fiscalía Regional, Daniela San Martín, sostuvo que, en el lugar del suceso, “fueron levantados proyectiles disparados por escopetas y armamento de guerra”.

Además, se encontró “una pancarta con escritos donde se solicita la libertad de personas que actualmente se encuentran en prisión, vinculados a la comisión de delitos asociados a la violencia rural”.

Por su parte, el ministro del Interior, Víctor Pérez, se refirió al asesinato del trabajador en Collipulli, afirmando que cree en “la democracia como instrumento para resolver nuestras controversias y para resolver nuestras diferencias. Ese es el camino que el Gobierno quiere llamar a todos los ciudadanos, y ese camino no puede ser obstaculizado por hechos de violencia”.