Considerando la grave crisis económica que atraviesan las pequeñas y grandes empresas con la pandemia, sobre todo durante el confinamiento obligatorio, el alcalde de Talcahuano, Henry Campos, propuso que se considere su apertura pese a las restricciones.

“Las cuarentena nos obligan a cerrar el comercio que no sea esencial, sin embargo, están abiertos los supermercados que ofrecen productos que son parte del comercio no considerado no esencial”, fundamentó.

En detalle, explicó que “se dice que las botillerías no son esenciales, pero el que quiere consumir alcohol va al supermercado, lo mismo a quienes necesitan una librería”.

Ante ese escenario, manifestó el jefe comunal, se producen dos problemas graves: falta de ingresos para el comercio local y alta movilidad y aglomeraciones en supermercados.

“Lo que pedimos es que se considere en futuras cuarentenas que se permita la apertura total del comercio, limitándose el traslado con permisos. Una persona que tenga dos permisos a la semana, tomará la decisión de dónde comprar”, sostuvo.

Según Campos, de concretarse esta iniciativa, se reduciría de gran manera el desplazamiento, puesto que los vecinos podrían abastecerse en sus barrios.

Para formalizar la idea, anunció que oficiará a los ministerios de Economía, Salud y al intendente del Biobío, Sergio Giacaman. Previamente, ya lo comentó con el titular de Economía, Lucas Palacios, y también con la Mesa Covid del Biobío.

“Se deben tomar medidas distintas y sensatas en torno a la actividad comercial. Hoy la pyme se está viendo afectada y si no se toman decisiones que permitan su funcionamiento, van a cerrar, aumentado la cesantía”, sentenció.