Peritajes químicos, declaraciones de testigos y de los propios detenidos permitieron descartar la ocurrencia de una crucifixión al interior de la 43° Comisaría de Peñalolén. Esos fueron los argumentos expuestos hoy por el fiscal Miguel Ángel Orellana tras la indagatoria realizada con la Brigada de Derechos Humanos de la PDI tras solicitar el sobreseimiento de los hechos denunciados en octubre de 2019.

El fiscal recalcó que, si bien la indagatoria permitió descartar la crucifixión y establecer que los detenidos acordaron dar tal declaración, el análisis de las cámaras de la comisaría permitió revelar delitos de tortura y apremios ilegítimos al interior de las dependencias policiales. En dicho caso ya fueron formalizados tres carabineros.

“El sobreseimiento solicitado por el Ministerio Público es parte del proceso de justicia, es parte del proceso de lograr verdad respecto de los hechos”, recalcó el fiscal Orellana.

El magistrado Eduardo Gallardo del 13° Juzgado de Garantía acogió parcialmente la solicitud de la fiscalía y sobreseyó los hechos respecto de la crucifixión explicando que “es relevante la investigación porque hay que perseguir las violaciones a los derechos humanos ocurridas desde el 18 octubre, pero perseguir los delitos que efectivamente se cometieron, en este caso es precisamente lo que se ha hecho”.

La Fiscalía de Peñalolén Macul también formalizó en los últimos días a un capitán de Carabineros por delito de apremios ilegítimos ocurridos en la comuna de Macul el 20 de octubre de 2019, luego que una víctima resultara herida en un ojo.