Comunidad Judía en Chile realiza tradicional Janucá en La Moneda
A pesar de las difíciles circunstancias producto de la pandemia, la Comunidad Judía de Chile (CJCh) celebró la tradicional ceremonia de Janucá en La Moneda. Con un aforo reducido a 20 personas y con la presencia del ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Monckeberg, como anfitrión del Palacio de Gobierno, significativa actividad que ya lleva 12 años ininterrumpidos.
Entre los asistentes destacaron el ministro vocero, Jaime Bellilio, el vicepresidente de la Cámara de Diputados, Francisco Undurraga, el presidente del Comité de Amistad Chile-Israel del Senado, Miguel José Ossandón, su par en de la Cámara de Diputados, María José Hoffman, el diputado Gabriel Silber, la Embajadora de Israel en Chile, Marina Rosenberg y el ex Presidente de la CJCh, el abogado Gabriel Zaliasnik.
El formato, más íntimo y pequeño que los habituales, no fue impedimento para transmitir los principales mensajes de esta festividad de traer luz, esperanza y milagros. Muy significativa fue la entrega del reconocimiento “Espíritu Maccabí” a la presidenta del Colegio de Enfermeras, María Angélica Baeza, en representación de todo el personal de salud -público y privado- “que ha cumplido un heroico rol y traído luz y esperanza en este año tan difícil para nuestro país y el mundo”.
La ceremonia contó con el tradicional encendido de la Menorá por parte de los rabinos y autoridades relevando los valores de paz, democracia, salud, subsistencia y diversidad, como así también un rezo por Chile.
En su intervención, el ministro Monckeberg destacó el simbolismo de las dificultades que debió enfrentar el pueblo judío durante la persecución griega, y las dificultades que se están enfrentando hoy a nivel mundial producto de la pandemia, y la importancia de traer luz.
Por su parte, Gerardo Gorodischer relevó “estamos en momentos históricos para la humanidad producto de la pandemia, y a nivel país con la oportunidad única de escribir el Chile de las próximas generaciones. Janucá no sólo tiene el simbolismo de la luz y los milagros, sino también significa inauguración, por lo que es una época propicia para instaurar e inaugurar nuevas etapas y ciclos”. Añadió, además, que, “como Comunidad Judía de Chile esperamos que la luz de Janucá tenga la capacidad de iluminar los rincones más oscuros y renovar un año para un país más solidario, justo y feliz”.