El presidente de la Asociación de Fútbol de Serbia (FSS), Slavisa Kokeza, renunció este lunes a su cargo tras ser interrogado por la policía como parte de una investigación sobre crimen organizado.

Kokeza, quien todavía no ha sido imputado tres semanas después del interrogatorio, mantuvo su inocencia, pero aseguró que renunciaba para no dañar la reputación de la FSS.

Los medios de comunicación serbios afirmaron que el nombre de Kokeza había sido uno de los proporcionados a las autoridades por el círculo del presunto jefe de la mafia, que estaba entre los detenidos a principios de febrero. Los fiscales están investigando posibles cargos de asesinato, tráfico de drogas y secuestro.

Los principales clubes de Belgrado, Partizan y Estrella Roja fueron investigados y las autoridades recuperaron armas y documentos incriminatorios de sus estadios.

Según informaciones policiales, el jefe de la mafia arrestado controla el grupo de ultras del Partizan ‘Principi’. En Serbia y otras naciones de los Balcanes, estos grupos de aficionados radicales han estado fuertemente vinculados durante mucho tiempo con grupos criminales de tráfico de drogas.

AgenciaUno/EP