Las comisiones unidas de Gobierno Interior y Constitución analizaron, por más de tres horas, aplazar las elecciones fijadas para abril, lo que se traduciría en una reforma constitucional que aún no ingresa al Congreso y que fue anunciada este domingo por el Presidente Sebastián Piñera.

En la sesión participaron los ministros secretario general de la Presidencia, Juan José Ossa; el ministro de Salud, Enrique Paris, y el titular del Interior, Rodrigo Delgado, quienes defendieron el criterio sanitario para justificar la medida.

El ministro Ossa explicó que aplazar las elecciones para el próximo 15 y 16 de mayo se propone por dos razones: proteger la salud y vida de los compatriotas y proteger la salud de la democracia. Mencionó la menor intención de los ciudadanos de participar en el proceso por el aumento de los contagios y agregó que se propone dicha fecha porque “se estima que 9,3 millones de personas ya estarán vacunadas, los mayores de 40 tendrán la primera dosis y los mayores de 50 ya tendrán dos dosis”.

El secretario de Estado indicó que el proyecto de ley -del cual no aclaró cuándo será ingresado-, “tendrá reglas claras para los candidatos y que una vez promulgada la reforma constitucional, se suspenderá la campaña electoral y se retomará un mes antes de la elección, hasta las 24 horas del 13 de mayo, exceptuando la publicidad en lugares privados”.

Otros puntos que recalcó, es que no existirá financiamiento adicional mientras las campañas estén suspendidas, que se utilizará el mismo padrón electoral y que se modifica el calendario electoral para juntar la segunda vuelta de gobernadores con las primarias presidenciales para el 4 de julio.

Sobre las condiciones sanitarias, la presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches reconoció que estamos en un momento de suma fragilidad sanitaria, al borde del colapso de la red, por lo que se debe mejorar la gobernanza de la pandemia con nuevas medidas.

Añadió que si bien están de acuerdo en aplazar las elecciones, no existe certeza de que en la fecha propuesta por el Ejecutivo (mayo), no exista un escenario adverso. Por ello, el Colmed plantea que se debe esperar una disminución clara de la curva, ver qué pasa con las nuevas variantes y que la vacunación haga efecto para definir el calendario electoral.

En ese sentido, Siches indicó a las y los parlamentarios que existen dos posibilidades: acoger la “apuesta” del Ejecutivo pero con mayor intervención, recursos y acciones para mitigar la curva; o actuar desde la perspectiva sanitaria más sobre seguro y tomar decisiones cuando baje la curva o luego del invierno, es decir, en septiembre o octubre para realizar las elecciones.

Por su parte, el ministro de Salud, Enrique Paris, explicó que aplazar las elecciones surgió del consenso, al que se sumó el Consejo Asesor en pandemia, ex ministros(as) de salud, el Colegio Médico y representantes del mundo político, candidatos presidenciales y presidentes de partidos, entre otros.

Posteriormente, entregó cifras sobre casos confirmados, camas UCI y UTI y variantes del virus; y dijo que estamos en una situación preocupante, si se considera la salud de las personas y la democracia, porque si existe baja cantidad de votantes, algunos criticarán la baja legitimidad del proceso electoral.

Agregó que se está vacunando a la velocidad más alta del mundo y que los efectos de la vacuna se producen hasta 14 días luego de la segunda dosis, donde ya hay más de 3 millones de pacientes; y con la primera dosis ya hay 6 millones. “Se espera el efecto rebaño para el 30 de junio, con el 80% de la población susceptible vacunada”, explicó.

Pese a ello, enfatizó que el 15 de mayo nadie puede asegurar un cambio significativo en la tendencia de la pandemia, aunque se espera que paulatinamente la vacunación disminuya el ingreso de pacientes a los hospitales a tratamiento intensivo.

A su vez, el presidente del Consejo Directivo del Servicio Electoral, Servel, Andrés Tagle, explicó que la postergación es factible al calendario electoral y sólo afectaría la segunda vuelta de los gobernadores regionales, que se realizaría con las primarias presidenciales el 4 de julio.

Tagle expresó que requieren una fecha clara de elecciones y que no pueden pasar del mayo, porque son 250 mil personas las que se movilizan para un proceso eleccionario, entre vocales, personal del Servel, delegados de junta, entre otros. Por ello, recalcó que esperan que la reforma se despache esta semana o a más tardar los primeros días de la próxima.

Por su parte, la delegada de PNUD en Chile, Marcela Ríos, indicó que postergar elecciones puede generar tensiones políticas, por lo que se deben generar consensos previos.

Agregó que, en 2020, la mayoría de las elecciones se trasladó al segundo semestre y que este año no se ha postergado ninguna elección en América Latina. De hecho, se mantienen los procesos electorales en Perú y Ecuador, programados para las próximas semanas.

Parlamentarios(as) de todos los sectores manifestaron que no existe certeza de lo que ocurrirá con las elecciones por el complejo escenario sanitario que se está enfrentando. Por ello, en su mayoría, solicitaron modificar la estrategia sanitaria actual, con medidas como el cierre de fronteras y menor aforo en medios de transporte y, por otro lado, ayuda social que garantice a la población permanecer en confinamiento.