Bélgica e Italia, las dos únicas selecciones que han sido capaces de sumar cuatro victorias en la Eurocopa antes de cuartos de final, disputarán este viernes una eliminatoria llena de alicientes en el Allianz Arena de Múnich, donde uno de los dos máximos aspirantes al título quedará descartado.

Un pasaje para semifinales se pone en juego en el estadio alemán. Un duelo de estilos entre el exuberante ataque belga y la solidez defensiva italiana, que recuerda a las de sus mejores tiempos y grandes éxitos. Dos Robertos, Martínez y Mancini, son los arquitectos de estos dos equipos tan competitivos.

Bélgica, que ya fue tercera en el Mundial 2018, intentará meterse en la tercera semifinal continental de su historia emulando los éxitos de 1972 y 1980, cuando además también llegó a su única final, perdida frente a Alemania Federal.

Tras una primera fase perfecta y bajar del trono europeo a Portugal en octavos con un gol de Thorgan Hazard (1-0), los ‘Diablos Rojos’ están muy pendientes de Kevin De Bruyne y Eden Hazard, que tuvieron que ser sustituidos por lesión ante la selección lusa. En caso de que no puedan jugar de inicio, Yannick Carrasco y Dries Mertens esperan su oportunidad.

Por su parte, Italia viene de un importante esfuerzo para eliminar a Austria (2-1) en la prórroga. Este triunfo extendió a 31 la racha de partidos invicta de la ‘Azurra’, que en octavos encajó su primer gol después de 11 encuentros con la portería a cero, señal de que ha recuperado su tradicional fortaleza atrás.

Además, Mancini recupera a un bastión de la zaga, Giorgio Chiellini, y también podrá volver a contar con Alessandro Florenzi, lesionado en el debut ante Turquía, aunque se espera que Giovanni di Lorenzo mantenga su lugar en el lateral derecho.

Italia tiene un esperanzado historial frente a Bélgica, rival al que ha batido en 14 de sus 22 enfrentamientos previos. Alargar ese buen historial le devolvería a una semifinal europea nueve años después.

AgenciaUno/EP

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