Tras darse a conocer los resultados de la encuesta CASEN 2020, la candidata presidencial del PS-PPD-PL-NT, Paula Narváez, criticó al Ejecutivo por lo que consideró una “desidia inexcusable” en el abordaje de la crisis económica al llegar tarde con las ayudas para las familias, acrecentando, con ese hecho, la pobreza y la desigualdad en nuestro país y, simultáneamente, alargando la duración de la pandemia y el sufrimiento producido por ésta.

“No sólo aumenta la pobreza y su expresión más extrema, la indigencia, sino que ello afecta a todo el territorio nacional con especial fuerza en determinadas regiones. Por eso quiero empatizar con las familias que hoy están sufriendo las consecuencias de la pandemia”, sostuvo.

Para Narváez si bien las autoridades han señalado que en comparación con América Latina las ayudas han permitido contener de mejor manera que en otros países el aumento de la pobreza, “lo cierto es que ello fue forzado por la presión de la oposición que exigió mayores transferencias a los hogares, en un contexto donde las posibilidades fiscales en Chile eran inmensamente superiores a las de los otros países en la región”.

“Si las ayudas que recién están llegando en estas fechas con el IFE universal que presentamos como parte de los acuerdos mínimos impulsado por la oposición se hubieran dispuesto desde el año pasado, no estaríamos lamentando el agravamiento de la pobreza que hoy viven las familias y, más aún, la prolongación de la pandemia con la crudeza de la que hemos sido testigos, con su secuela de muerte y dolor”, espetó.

Según la representante del socialismo democrático, la encuesta Casen también evidencia que la desigualdad de ingresos ha tenido un retroceso brutal, “cercano a los niveles que teníamos en 2003” y que de no existir políticas de protección de los ingresos, “la situación sería aún más extrema”.

Narváez aseguró que el costo de la pandemia y de la crisis la estaban pagando los trabajadores y criticó al Gobierno de Sebastián Piñera y a los ex ministros que hoy participan de la carrera presidencial por lo que consideró “una desidia inexcusable” en el manejo de la crisis económica “al llegar tarde con las ayudas para las familias, acrecentando la pobreza y la desigualdad en nuestro país”. Todo esto, además “debilitó la efectividad de las cuarentenas y de los cuidados en general, prolongando la crisis sanitaria y el sufrimiento de la población”

Finalmente, Narváez subrayó que su gobierno tendrá un plan de recuperación urgente que no sólo apunta en la dirección de dinamizar la actividad económica con generación de empleo, “sino con un fuerte énfasis en empleos decentes; aumento del salario mínimo; ingreso básico universal que inicie su despliegue con mujeres y niñez; aumento del monto y extensión de una pensión básica universal, junto con el despliegue de medidas que permitan la provisión oportuna y de calidad en salud, vivienda, educación”. “No se trata sólo de reactivar el Imacec; se trata de reactivar, reparar y curar”.

“Hablamos también de pensiones para erradicar pobreza en personas mayores, No más AFP y fin al sistema previsional de las fuerzas armadas. Así como una reforma tributaria integral que no sólo implique contar con los recursos que habrán de permitir financiar todas estas medidas sino que en sí mismo tenga un impacto distributivo”, concluyó.