Como prioridad fue definida la llegada este viernes del gobernador regional, Ricardo Díaz Cortés, a la comuna de San Pedro de Atacama, para analizar en terreno las soluciones a la falta de suministro de agua potable en la localidad.

La máxima autoridad regional visitó la planta de procesamiento que actualmente administra el Comité de Agua Potable Rural y Alcantarillado (CAPRA), donde hizo un duro balance sobre su actual funcionamiento.

“Esta situación viene desde hace años pues a esta planta no se le ha hecho la mantención correcta. No produce el agua potable que se necesita en San Pedro de Atacama. Por eso es tan baja la presión y tan baja su calidad. De toda el agua que entra, solo la mitad se puede potabilizar, la otra mitad se va. En definitiva, está todo mal”, reconoció Díaz.

Por ello, el jefe regional destacó que desde noviembre se encuentra trabajando el Gobierno Regional en conjunto con la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) para generar acciones que permitan remediar la situación.

“Ellos están haciendo un plan de mantención y están haciendo unas mejoras que van a mantener el recurso permanente. Si a eso necesitamos agregar apoyo con camiones aljibes, se va a hacer”, manifestó.

Sin embargo, el gobernador Díaz adelantó que buscará implementar una solución definitiva en la comuna, construyendo una nueva planta de procesamiento, una obra que costaría cerca de $3mil millones.

“Vamos a comprar una planta de procesamiento, una nueva planta modular, que tenga menos rechazo, que use energía fotovoltaica, que permita mejor capacidad de alimentación en este lugar. Con eso, que nos va a durar unos 7 meses en hacerlo, habrá agua potable con resolución sanitaria y con eso vamos a poder hacer el hospital y otros proyectos. Nuestra solución es una solución definitiva, en eso vamos a invertir más de 3 mil millones de pesos para que toda la comunidad de San Pedro tenga el trato que merece”, insistió.

El anuncio y la disposición del Gobierno Regional fue valorado por las comunidades. Manuel Salvatierra, presidente del Consejo de Pueblos Atacameños, y señaló que la temática no solo afecta a las comunidades indígenas, sino que representa un malestar en toda la población.

“Es nuestra preocupación poder apoyar las iniciativas que pone el GORE, en conjunto con el municipio y la DOH. Desde nuestra participación queremos que se construyan a la brevedad estas soluciones y que vayan en directo beneficio a los habitantes del territorio. En una capital turística de Chile, que concentra paisajes maravillosos, no podemos permitir estar en una situación de falta de agua potable. Nos hemos comprometido en poder socializar las iniciativas de mediano y largo plazo, y vamos a cumplir nuestro rol para que los recursos económicos se enfoquen de forma urgente en estas obras”, concluyó.