Buscan consagrar la protección de la infancia en la nueva Constitución
La Constitución asegura a todas las personas “El derecho de los niños y adolescentes a una infancia e inocencia protegida. El Estado resguardará el rol preferente de la familia para la consecución de dicho fin, y sólo podrá intervenir en los determinados casos, calificados por la ley, en que la familia se viese impedida de ejercer su función. Bajo ninguna circunstancia la ley podrá negar o imponer condiciones que impidan el libre ejercicio de este derecho preferente de la familia a proteger la infancia e inocencia de los niños y adolescentes. Los preceptos legales que limiten este derecho no podrán afectarlo en su esencia”.
Con esta iniciativa de norma presentada a la Convención Constitucional, la representante por Arica en la instancia, Pollyana Rivera, busca proteger a los niños, niñas y adolescentes en la Carta Fundamental que se redactará.
El documento presentado establece como justificación para presentar la propuesta, los distintos compromisos que tiene Chile a nivel internacional en la defensa de los derechos de la niñez, y que a juicio de la convencional republicana, deben quedar también plasmados en la próxima Constitución.
Uno de los argumentos que se menciona en el texto de la iniciativa es que “el Derecho Internacional en materia de Derechos Humanos ha señalado que los niños, por su especial vulnerabilidad, requieren de una especial protección. La Declaración de los Derechos del Niño de 1990 señala en su preámbulo que «el niño, por su falta de madurez física y mental, necesita protección y cuidado especiales, incluso la debida protección legal, tanto antes como después del nacimiento”.
Al respecto, Rivera afirmó que “en Chile venimos hace mucho tiempo con la promesa no cumplida de que tenemos que poner a los niños primeros en la fila, y de la importancia de priorizarlos en el diseño de las políticas públicas, pero muchas de esas promesas no han pasado del discurso”.
La representante por Arica agregó que “llegó la hora de dejar atrás la retórica y comenzar a cumplir los compromisos que como Estado y sociedad tenemos con la infancia en nuestro país, ya que muchos niños y niñas ven a diario vulnerados sus derechos ante la falta de responsabilidad de quienes están llamados a cuidarlos”
En este sentido, la norma constitucional propuesta, pone énfasis en que es la familia la que tiene el derecho preferente de educar y cuidar a los niños y adolescentes, como núcleo fundamental de la sociedad y ante la amenaza que representa la posibilidad de que el Estado intente sustituir ese rol trascendental.
Al respecto, Rivera indicó que “en esta sociedad de los derechos, los adultos tenemos el deber de cuidar a los niños, a quienes serán las futuras generaciones del país, para que crezcan y se desarrollen en un ambiente sano para su salud física y mental”.
La convencional por Arica sentenció que “tenemos que ser capaces de ofrecer bienestar a nuestros niños y niñas, y ello pasa, en primer lugar, por consagrar sus derechos en la Constitución y disponer de una institucionalidad que dé cumplimiento a las obligaciones que como país tenemos con ellos”.