Ley de Plásticos de un solo uso comienza a regir este fin de semana
De acuerdo a estudios internacionales, el plástico de un solo uso se tarda cerca de 150 años en desintegrarse, hecho preocupante para el medioambiente, por lo mismo desde este 13 de febrero comenzará a regir la nueva Ley 21.368, iniciativa que busca poner freno a la gran contaminación que estos elementos producen al ecosistema.
La nueva legislación establece limitaciones a la entrega, por parte de los establecimientos de expendio de alimentos preparados, de productos de un solo uso, tales como vasos, tazas, cubiertos, palillos, pocillos, bombillas, platos, copas, cajas o envases de comida preparada, bandejas, sachets, individuales y tapas (salvo las de botellas), que no sean reutilizables.
Y en ese sentido, la directora ejecutiva de Círculo REP, Carmen Gloria Ide, explicó que “con la entrada en vigencia de la Ley de Plásticos de un solo uso comienza a correr el plazo para llegar a agosto del 2024 con esta norma implementada en todo nuestro país. Esta norma aplica a aquellos lugares o establecimientos que venden alimentos, y lo que busca es que se pueda fomentar la reutilización, se busca la certificación de plásticos de un solo uso para poder ver que aquellos que no son reutilizables vayan de salida del mercado”.
La también académica de sustentabilidad en la Universidad del Desarrollo, agregó que “hay un plazo de tres años para poder adaptarse para lograr que esto esté absolutamente implementado en nuestro país, y los deliverys también entran en esta normativa. Ya no va a ser posible entregar cualquier tipo de plástico, sino que va a ser necesario aquellos que estén probadamente cumpliendo con esta normativa”.
Además, recalcó que “el gran desafío que tiene esta ley, es sin duda, que logremos desarrollar de manera cultural una intención por parte del consumidor de tener un comportamiento más responsable respecto de estos materiales, es decir, no vamos a aceptar que nos entreguen plástico que no haya sido certificado. También esta normativa va a permitir que se empiece a desarrollar una nueva industria del reciclaje en nuestro país”.
Por su parte, el abogado Jorge Canals, socio y director del área Medio Ambiente y Regulación de Moraga & CIA, recalcó que “uno de los grandes problemas de esta ley es que está suscrita al ámbito de la fiscalización municipal con sanciones en policía local y muchas veces sabemos que los municipios no cuentan con el personal suficiente para hacer valer esta ley”.
Canals espera que “tal como la Ley de Bolsas Plásticas, -que finalmente fueron las propias personas, los propios ciudadanos que internalizaron esta conducta y provocaron este cambio de habito-, esto también va ir en la misma línea, van a ser los mismos ciudadanos y ciudadanas quienes van a fiscalizar el cumplimiento de esta iniciativa, exigiendo en los locales de comida rápida, y similares la entrega de estos utensilios”.
Cabe destacar que desde ahora en adelante los plásticos certificados deberán ser fácilmente distinguibles para los consumidores y las botellas plásticas desechables, que se comercialicen y deberán estar compuestas por un porcentaje de plástico que haya sido recolectado y reciclado dentro del país.