La ministra del Interior y Seguridad Pública, Izkia Siches, defendió el estado de excepción constitucional de emergencia decretado en la Macrozona Sur, tras críticas desde el mundo mapuche.

A su vez, la secretaria de Estado rechazó la idea de que el Gobierno haya “declarado una guerra” al enviar a las Fuerzas Armadas a custodiar la Región de La Araucanía y las provincias de Arauco y Biobío, en la Región del Biobío.

La medida fue anunciada el lunes y comenzó a regir el martes.

“No daría pie para que nos sentemos a conversar con el Gobierno, porque con fusiles manchados de sangre nosotros no vamos a conversar”, deploró ayer el machi Fidel Tranamil, uno de los líderes de la lucha mapuche y una de las personas perseguidas en el montaje que resultó ser la “Operación Huracán”.

“Sacando a los militares a la calle lo que ha hecho es declararles la guerra a los mapuche. Los militares están preparados para eso, para ir a la guerra, no para resguardar el orden público, para eso están Carabineros y la PDI”, acusó, a su vez, Víctor Queipul, lonko de la comunidad Temucuicui, en La Tercera.

Ante ello, Siches insistió que “nuestro Gobierno no ha hecho un llamado a la guerra, hoy estamos comprometidos con asegurar el abastecimiento y liberar las rutas, justamente para que llegue el Estado a los distintos territorios”.

Asimismo, enfatizó que “seguimos disponibles al diálogo, invitamos a todas las personas de nuestro país a trabajar en los problemas de fondo”.

En un punto de prensa, Siches abordó también la decisión del Gobierno de no interponer una querella contra Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco Malleco, tras su llamamiento a la “resistencia armada” contra el Estado, acción penal cuya presentación que había anunciado el fin de semana la ministra de Desarrollo Social, Jeanette Vega.

“Primero, (quiero) clarificar que el Ministerio que está cargo de la seguridad es el Ministerio del Interior y Seguridad Pública”, puntualizó.

A la vez, negó que el Ministerio Público haya quedado impedido de investigar a Llaitul. “La Fiscalía tiene antecedentes, denuncias y querellas desde hace mucho tiempo, del 2018, 2016, y frente a ello, sin duda no tiene las manos atadas”, aseguró Siches.

La Moneda no presentará una querella, ya que no consideró “necesario” sumar otra, explicó ayer el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien aclaró que van a “aportar antecedentes” a una denuncia existente desde 2021.

El Presidente Gabriel Boric complementó más tarde que “nuestro Gobierno persigue delitos, no persigue ideas ni declaraciones” como la del líder de la CAM.