La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) consideró que las nuevas medidas incluidas en el Plan de Fronteras Seguras anunciadas ayer por el Gobierno de Chile son “discriminatorias e insuficientes” para estimular los viajes hacia y desde el país.

“Mientras que los ciudadanos y residentes totalmente vacunados podrán viajar internacionalmente sin solicitar un permiso previo, el país sigue cerrado a los extranjeros”, dijeron.

“Además, factores como la necesidad del pase de movilidad, la prohibición de viaje de los niños no vacunados, así como la extensión de la cuarentena obligatoria en los hoteles por cinco días adicionales para ciudadanos o residentes que regresan sin el pase de movilidad que solo se otorga en Chile, añaden más complicaciones a cualquiera que pretenda viajar”, sostuvieron.

“Además, incluso aquellos residentes y ciudadanos con pase de movilidad cuya residencia principal se encuentre a más de cinco horas en transporte terrestre desde Santiago de Chile, se verán obligados a permanecer 10 días en un hotel de cuarentena”, manifestaron.

“Recordamos que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que en caso de que se tenga que implementar cuarentena para los viajeros internacionales, que se haga en un “enfoque basado en el riesgo” y que haya revisiones periódicas con el fin de levantar tales condiciones cuando estos ya no sean necesarios”, añadieron.

“Entendemos que el gobierno está enfocado en proteger la salud y el bienestar de los ciudadanos de Chile, y aunque las medidas de control fronterizo revisadas permitirán a algunos ciudadanos y residentes viajar, siguen siendo muy restrictivas. Pedimos urgentemente al gobierno que siga las últimas recomendaciones publicadas por la OMS, que establecen un enfoque científico sobre la apertura de fronteras y gestionar el riesgo de COVID-19”, dijo Peter Cerdá, vicepresidente Regional de IATA para las Américas.

Antes de esta crisis sin precedentes, el transporte aéreo en Chile aportaba 7.100 millones de dólares (US) al PIB del país y mantenía unos 189.000 empleos (directos e indirectos). En total, el 3,2% del PIB del país se sustentaba en la aportación del sector del transporte aéreo y de los turistas extranjeros que llegaban por vía aérea. Debido al impacto de la pandemia de COVID, más de 120.000 puestos de trabajo y más de 4.000 millones de dólares (US) de contribución al PIB que son sostenidos por el sector del transporte aéreo en Chile se han perdido, informaron.

“A medida que avanzamos hacia la primavera y el verano en el hemisferio sur, Chile debe definir claramente cómo planea dar la bienvenida a los turistas y a los negocios internacionales. Sin embargo, parece que el gobierno no está dejando que la ciencia guíe el camino y esto está poniendo en peligro otra temporada turística completa, y junto con ella la viabilidad a largo plazo de la cadena de valor de la aviación en el país”, concluyó Cerdá.