El gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, llegó esta mañana hasta el sector de las piscinas decantadoras y de protección de la Quebrada de Macul.

Acompañado de la alcaldesa de Peñalolén, Carolina Leitao, recorrió el lugar para fiscalizar el estado óptimo del sector para soportar las fuertes lluvias que se han previsto para esta semana en la capital.

Cabe recordar que la Oficina Nacional de Emergencia (ONEMI) decretó Alerta Temprana Preventiva por un frente de mal tiempo que – se espera- podría llegar entre miércoles y viernes hasta los 80 mm caídos.

Orrego afirmó que “es un frente muy significativo, de acuerdo a las estimaciones preliminares. Algo así como el 80% de lo que ha llovido todo el año, pero concentrado en solo tres días y, especialmente el día jueves, con algunas horas de mucha intensidad”.

“El llamado que estamos haciendo a la ciudadanía es a prevenir más que a lamentar. No hemos tenido muchas lluvias durante este año, por lo que las canaletas de las casas, los sumideros de aguas lluvia, tal vez no tengan la limpieza que corresponde”, agregó.

La autoridad aseguró que la Gobernación Regional “va a fiscalizar que las motobombas que compró el GORE RM hace ya seis años y, que fueron entregadas tanto al MOP como al SERVIU Metropolitano, estén disponibles para eventuales inundaciones”.

“Vamos a fiscalizar obras que hicimos como Gobierno Regional entre 2014 y 2018, como el colector de Barón de Juras Reales, en Conchalí, que era un lugar emblemático que se inundaba. O como las obras acá en la Quebrada de Macul, que fue escenario de uno de los mayores aluviones en nuestra ciudad, y donde en marzo de este año se hizo un reforzamiento y limpieza de las mismas, lo que me genera tranquilidad en este sector de la ciudad”, complementó.

Sin embargo, Orrego mostró preocupación por la vulnerabilidad de lugares en Lo Barnechea y el Cajón del Maipo, que fueron afectados por aluviones en el verano pasado y que aún se encuentran en recuperación.

“Se habla de una isoterma de 3 mil metros, es decir, va a llover muy alto en la cordillera y eso puede provocar desprendimientos en las zonas más altas. Así es que un llamado a la gente a abstenerse de hacer excursiones a la cordillera y mucha precaución a quienes estén cerca de las quebradas. A estar vigilantes, a cuidarnos entre todos y a tomar las medidas que corresponda”, planteó.

Por su parte, la alcaldesa Carolina Leitao señaló que “ante el anuncio del frente de mal tiempo nos debemos mantener todos alerta y con nuestros equipos de emergencia preparados. Eso significa hacer trabajos como limpieza de canaletas, sacar las ramas que estén sobre las techumbres y que puedan caer con el viento, y lo que es el barrido de calles, y que las personas no traten de canalizar las aguas lluvias al alcantarillado, porque se pueden rebalsar”.

“La labor que hacemos como municipio es mantenernos preparados en la limpieza de sumideros, pozos absorbentes, que los turnos del equipo municipal estén veinticuatro/siete en caso de una emergencia. Y también el reparto de sacos de arena en lugares que ya tenemos detectados como críticos, donde se generan inundaciones específicas”, sentenció Leitao.