Rodolfo Lillo Almeida tiene 22 años, pero hace dos años atrás su vida dio un giro radical. El 28 de septiembre del 2019 se encontraba compartiendo con una amiga en una vivienda de Viña del Mar, lugar hasta donde llegó un sujeto desconocido que se encontraba de manera ilegal en el país, quien supuestamente motivado por los celos lo atacó y apuñaló una docena de veces, hiriendo importantes órganos, como pulmones, hígado y corazón.

El joven comenzó a desangrarse y la ausencia de flujo sanguíneo a su cerebro derivó en una hipoxia causándole una severa alteración neurológica, que hoy lo tiene postrado, en estado vegetativo y sin control de su cuerpo.

El agresor se encuentra detenido en prisión preventiva, a la espera del juicio oral en su contra, mientras su madre, Fabiola Almeida, ha dedicado su tiempo completo al cuidado de Rodolfo. Dejó de trabajar para cuidarlo y pese a todos los pronósticos negativos que prácticamente daban por muerto a su hijo, sigue luchando para encontrar un mejoría en su estado. La rehabilitación ha sido muy lenta y costosa, no habla, no se mueve y sólo escucha y observa.

Pero la familia no ha perdido las esperanzas pese a lo dramático del caso, sobre todo después de conocer un inédito procedimiento que podría mejorar en algo la calidad de vida del joven. Se trata de una inédita operación de neurocirugía que consiste en instalar un chip en su cerebro para activar algunas funciones motoras y devolver los estados de conciencia.

“Hoy Rodolfo tiene una pequeña oportunidad a través de una operación transcraneal profunda cerebral. Si todo resulta de acuerdo al neurocirujano y nuestras esperanzas, Rodolfo podría recuperar capacidad cognitiva, que le daría una mejor calidad de vida y la posibilidad de rehabilitación. El Hospital San Borja costea todo menos el chip, que es para lo que estamos haciendo las recaudaciones, porque mientras exista un 2% de posibilidades, hay que jugársela por eso”, relata su madre quien no pierda las esperanzas.

La idea sería entregarle más energía a la parte baja del cerebro e ingresar a la parte dañada que ya registró a través de una resonancia. Al instalar el dispositivo se genera un impulso eléctrico a las neuronas que están en buen estado para que comiencen a funcionar y reemplacen a las que ya dejan de cumplir sus funciones.

El problema es que la cirugía de instalación del chip tiene un costo que bordea los 25 millones de pesos, más un costoso proceso de recuperación y medicamentos.

Es por eso que Fabiola y su familia en una medida desesperada, han organizado una rifa de un vehículo cero kilómetro para poder costear los gastos. Fijaron el 30 de octubre para realizar el sorteo y el valor del número es de $10 mil pesos.

Se puede participar vía depósitos o transferencia bancaria a nombre de Fabiola Almeida, rut 14.272.878-8, en cuenta vista 00-034-23153-52 del Banco de Chile y enviando el comprobante de depósito al mail falmeidav@gmail.com

Es una medida extrema reconoce su madre, pero la única forma de costear un procedimiento que podría mejorar la calidad de vida de Rodolfo en su lucha por seguir viviendo.

Foto: Cedida.