Diputados UDI califican a Boric como el “germen de la inconsecuencia”
Como el “germen de la inconsecuencia” calificaron los diputados de la UDI Juan Manuel Fuenzalida, Sergio Bobadilla y Cristhian Moreira al candidato presidencial de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, luego que en su programa de gobierno -entregado a menos de tres semanas de las elecciones- se bautizara como “pro pyme” pese a las innumerables veces que se negó a apoyarlas en el Congreso.
En concreto, los parlamentarios gremialistas recordaron que en julio de este año presentaron un proyecto de resolución para solicitarle al Gobierno un programa de indemnización y reparación para los comerciantes que fueron víctimas de la delincuencia durante el estallido social. Sin embargo, y pese a que la solicitud apuntaba a beneficiar en específico a los “pequeños y medianos locatarios de las denominadas zonas cero del país”, el candidato presidencial decidió votar en contra.
“Gabriel Boric es el germen de la inconsecuencia en nuestro país. Desde que es candidato lo hemos visto todos los días cambiando de opinión, al punto que tuvo que bajar su programa para corregirlo e incorporar fuertemente las ideas del Partido Comunista. Pero ahora, quienes van a sufrir los efectos de su inconsecuencia van a ser justamente las pymes que él dice tanto representar, pero que les dio la espalda cuando tuvo que apoyarlas en el Congreso”, cuestionaron los diputados UDI.
En esa línea, Fuenzalida, Bobadilla y Moreira agregaron que “las verdaderas víctimas del estallido no son los grupos de vándalos que Boric quiere indultar, sino que los emprendedores, comerciantes y locatarios que perdieron todo por culpa de estas hordas de delincuentes. Lamentablemente, el candidato de extrema izquierda sigue creyendo lo contrario, buscando indemnizar a los violentistas y no a las familias de clase media que perdieron sus negocios”.
Por último, los parlamentarios UDI aseguraron que la propuesta de Boric de establecer un sueldo mínimo de $500.000, rebajando a 40 horas la jornada laboral, “será un golpe mortal para miles de micro, pequeñas y medianas empresas que están tratando de salir adelante después de dos años de turbulencia producto de la grave violencia y los efectos económicos derivados de la pandemia”.
“Todos quisiéramos aumentar significativamente el sueldo mínimo, pero hacerlo de esa manera y rebajando a 40 horas la jornada laboral, sin ningún plan de gradualidad, es de una irresponsabilidad tremenda que lo único que provocará es que miles de pymes tengan que cerrar y dejen de generar empleos en nuestro país”, advirtieron los diputados gremialistas.