EEUU pide a Cuba no reprimir las protestas y amenaza con tomar nuevas medidas
El Gobierno de Estados Unidos ha instado al de Cuba a permitir a la oposición manifestarse “sin miedo a represalias o violencia” y ha advertido de que permanecerá vigilante en las próximas horas, lo que deja abierta la adopción de nuevos castigos si hay “represión” y “violaciones de Derechos Humanos”.
El mensaje, por boca del jefe de la diplomacia norteamericana, Antony Blinken, llega a solo unas horas de que tengan lugar nuevas movilizaciones con las que la disidencia aspira a replicar los mensajes que ya lanzó en julio: “respeto por los Derechos Humanos, mayor libertad de expresión y el fin de la mala gestión política por parte de un régimen autoritario que no ha logrado cubrir las necesidades más básicas” de la población.
En julio, “el régimen cubano respondió (a las movilizaciones) con violencia, censura, arrestos y juicios sumarios, negando a sus ciudadanos sus derechos a la libertad de expresión y a la libertad de reunión pacífica”, ha lamentado Blinken en un comunicado. Washington ya adoptó varias rondas de sanciones tras estas marchas, dirigidas principalmente contra las fuerzas de seguridad de la isla.
Este 15 de noviembre, “los cubanos pedirán de nuevo a su Gobierno que oiga sus reivindicaciones para un futuro mejor”. Sin embargo, “el régimen ha negado el permiso a los manifestantes, expulsado de sus trabajos a simpatizantes de la oposición y amenazado a disidentes con la cárcel”, ha añadido el secretario de Estado.
Blinken ha exhortado al Ejecutivo de Miguel Díaz-Canel a “respetar los derechos de los cubanos”, lo que pasa por autorizar las manifestaciones y permitir la comunicación sin restricciones, para que haya “un libre intercambio de información”. En este sentido, ha instado al Gobierno a “rechazar la violencia” y “aprovechar esta oportunidad histórica para escuchar las voces de su gente”.
Washington también ha aprovechado para dirigirse a sus “aliados democráticos” en la comunidad internacional, de tal forma que también den su apoyo a los manifestantes opositores. Blinken considera “imperativo” que el mundo también salga en defensa de derechos que sin “universales”, sin importar el lugar ni el momento en que estos se vean “amenazados”.
“Debemos hablar con una sola voz, instando al Gobierno cubano a respetar a quienes ejercen su derecho a manifestarse pacíficamente el 15 de noviembre y a liberar a todas las personas detenidas injustamente”, ha reclamado Blinken.
La respuesta del Gobierno cubano no se ha hecho esperar y, por boca del ministro de Exteriores, Bruno Rodríguez, ha denunciado la injerencia estadounidense. Así, ha exhortado a Blinken a “aprender de una vez” que “el Gobierno cubano solo se debe a su pueblo y rechaza en nombre de este la intromisión de Estados Unidos”.
“Defendemos el derecho a disfrutar en paz el camino a la normalidad y enfrentar sin injerencia los desafíos que tenemos por delante”, ha dicho Rodríguez, que ya esta semana había acusado a la Administración de Joe Biden de tratar de influir en la isla a través de las movilizaciones promovidas por la disidencia.
AgenciaUno/EP