El primer ministro de Reino Unido, Boris Johson, ha confirmado este lunes la muerte de una persona infectada con la variante ómicron del coronavirus, anticipo de unas semanas en las que el propio Gobierno teme que haya considerablemente más contagios y más fallecimientos debido a la pandemia.

“Lamentablemente sí, ómicron causa hospitalizaciones y tristemente al menos una persona infectada con ómicron ha muerto”, ha indicado Johnson durante una visita a una clínica de vacunación contra el COVID-19 en Londres, según ha recogido Sky News. En este sentido, ha pedido a la ciudadanía que se administre la dosis de refuerzo de la vacuna.

La confirmación de la muerte de una persona infectada con ómicron llega con la variante ya plenamente extendida en Reino Unido, puesto que la agencia de salud pública ha notificado este miércoles 1.576 nuevos casos vinculados a esta mutación, lo que eleva el recuento total a 4.713.

El Ministerio de Salud ha notificado, además, 54.661 nuevos casos de COVID-19 en general, así como 38 fallecimientos, si bien las cifras de principios de semana suelen ser menores y el ministro de Salud, Sajid Javid, ha reconocido ante la Cámara de los Comunes que el dato real de contagios diarios ronda los 200.000.

Javid ha dado por hecho que ómicron será la variante más común en Londres en cuestión de dos días y representa ya alrededor del 20 por ciento de casos en toda Inglaterra. El recuento de hospitalizaciones y muertes aumentará “drásticamente” en las próximas semanas, por lo que el ministro ha confirmado que la sanidad pública volverá a prepararse, informa la BBC.

El primer ministro declaró el domingo el nivel 4 de emergencia por la variante ómicron y anunció que toda la población inglesa de más de 18 años podrá solicitar ponerse la dosis de refuerzo de la vacuna contra el COVID-19 antes de fin de año. El nivel 4 refleja un “alto nivel de contagios”.

AgenciaUno/EP