Las autoridades sanitarias de Corea del Sur han informado este jueves de 109 muertes más por COVID-19, una cifra sin precedentes desde el inicio de la pandemia y que llega después de los récords en las cifras de contagios que ha encadenado el país asiático en el mes de diciembre.

La Agencia para el Control y la Prevención de Enfermedades surcoreana tiene registrados 589.978 positivos por coronavirus desde el inicio de la pandemia, 6.919 más que el miércoles. El país ha secuenciado por el momento 246 casos de la variante ómicron, considera más contagiosa que las anteriores.

La ligera contención en los contagios no se traduce de momento en una mejora de la situación hospitalaria, ya que este jueves se ha registrado un nuevo máximo en la cifra de enfermos en estado crítico –1.083– y la tasa de ocupación en UCI ronda el 80 por ciento. También siguen subiendo los fallecidos y ya son 5.015 los enfermos que han perdido la vida, según la agencia de noticias Yonhap.

El Gobierno, que ha prometido reforzar las plazas en hospitales, ha dado marcha atrás en la desescalada y ha limitado a cuatro el número máximo de personas en reuniones privadas. Además, ha restringido la actividad comercial nocturna.

AgenciaUno/EP