Uno de los efectos colaterales que trae esta pandemia es la ansiedad que provoca el encierro. El aislamiento social está siendo la principal manera de evitar el contagio del COVID-19, por esto, muchas personas están la mayor parte del tiempo confinadas en sus casas y les surge la preocupación que terminado este período aumenten de peso.

¿Cómo se puede evitar esto que se nos hace tan difícil? La primera tarea es realizar una planificación de nuestras comidas. No dejar al azar lo que comeremos durante la semana.

Entonces es importante saber qué comprar. Todo parte por ahí. Abastecernos de los productos correctos es clave para comenzar a alimentarnos mejor y realizar preparaciones que no solo sean sabrosas, sino también saludables, ayudando a fortalecer nuestro sistema inmune.

La nutricionista dietista Constanza Sanhueza, especialista en el tratamiento contra la obesidad, nos orienta sobre qué alimentos deben ser indispensables para tener en este periodo de cuarentena. “Me iría en primer lugar, sin duda, por tener una despensa rica en frutas y verduras frescas de todos los colores, ya que cada color nos entrega vitaminas minerales antioxidantes diferentes. Si creemos que se nos echan a perder muy pronto podemos lavar, almacenar y congelar”, indicó.

Además, agrega que es importante incluir provisiones con una gran fuente de proteínas ya que “aparte de darnos saciedad, ayuda a mantener las funciones vitales en nuestro organismo generando una mayor síntesis y recuperación muscular si es que acompañamos esta cuarentena con actividad física”.

Según lo anterior entonces hay que privilegiar huevos, carne, pollo, pavo, pescado y legumbres. Este último se repite en la mayoría de las indicaciones a la hora de tener una dieta balanceada principalmente porque lentejas, porotos y garbanzos poseen un alto nivel proteico de origen vegetal y además por dar sensación de saciedad.

Para tener en cuenta, considerando que debemos comprar para largos períodos de tiempo, son los enlatados como el atún o jurel, ya que son fácil de adquirir y poseen mayor tiempo de duración. “Lo que sí deben ser al agua, lavarlas porque traen un alto contenido de sal, poner el contenido en un colador y dejar bajo el agua fría” recomienda la profesional.

Otro punto fundamental para no comer a destajo es mantenerse hidratado. Se recomienda consumir al menos 2 litros de agua, puede ser pura, infusiones, agua de hierbas, té, etc. Según un artículo publicado por el Centro de Nutrición de Clínica Las Condes, esto nos ayuda “especialmente cuando se está ansioso, ya que muchas veces no sabemos si es sed, hambre y comemos innecesariamente. Incluso para tener ocupadas las manos”.

¿Qué evitar?

Ahora veamos qué ignorar en nuestra compra. Para la nutricionista, los alimentos que debemos evitar son los ultra procesados, como las galletas, margarinas, dulces, bebidas, salchichas, hamburguesas, sopas o fideos instantáneos, nuggets de pollo o pescado. Sin duda son más atractivos, económicos y fáciles de preparar, pero “son alimentos que han sido tan alterados, incorporándoles muchos aditivos, conservantes, azúcares, que pierden su forma original, este tipo de alimentos puede influir de manera directa y negativa en nuestro sistema inmunológico”.

Otra de nuestras tareas es evitar el consumo de azúcar y grasas, pero se nos hace difícil ya que para muchos la comida está asociada a un acto de amor, y es así como muchos quieren regalonear a su familia con tortas, queques, dulces, pan amasado, clásicos de nuestra cocina.

La nutricionista nos da otra visión y fue enfática al decir que “soy de la idea que entregar cariño es entregar salud, preparar alimentos ricos en grasas y azúcares a diario es hacernos daño, no digo que no se preparen, solo que siempre hay que pensar en una receta lo más natural posible, buscar alternativas como endulzar con frutas en vez de tazas de azúcar, preferir aceites de origen vegetal de buena calidad en vez de manteca o margarina, preferir harinas integrales o con una buena fuente de fibra etc. Siempre podemos cocinar rico , la idea es buscar la mejor opción para nuestra familia”.

Sumado a la alimentación balanceada, existen otros factores para evitar subir de peso en este período. Constanza Sanhueza señala que es necesario “respetar el ciclo circadiano del sueño, ya que si lo tenemos alterado también nuestra alimentación estará alterada, lo importante es instaurar horarios, respetar horas de sueño, y comer de manera balanceada sin restricciones, acompañar con actividad física y dejar de lado los ultra procesados”.

Si a pesar de todos estos consejos siente que le da miedo subirse a la pesa, esta profesional a través de sus RRSS ofrece un programa de asesorías nutricionales on-line, en donde se le ayuda al paciente a generar cambios en sus hábitos alimenticios a través de pautas personalizadas. @conii.nutro www.constanzaesnutricion.cl.