En un trabajo en conjunto entre el Arzobispado de Santiago y la municipalidad de Renca, la Casa de Retiro Santo Cura de Arz, recibió a cerca de 50 personas en situación de calle para enfrentar esta pandemia.

El lugar se suma al edificio de la Vicaría de la Esperanza Joven, a las parroquias Sagrado Corazón de la Alameda, San Pablo Apóstol en Santiago Centro y Santa Rosa de Lo Barnechea, además de los 17 espacios que la Iglesia de Santiago puso a disposición de la autoridad sanitaria.

El Obispo Auxiliar de Santiago, padre Cristián Roncagliolo, sostuvo al respecto que “este nuevo albergue que se habilita es una nueva expresión del trabajo mancomunado con una municipalidad. Estamos todos trabajando juntos en generar una virtuosa corriente de solidaridad y esta, es una expresión de ello. Más de 40 personas en situación de calle que durante este tiempo vivirán en un albergue las 24 horas del día, tendrán las comidas y también una serie de elementos que les ayudarán a vivir con una mejor dignidad”.

El alcalde Claudio Castro agradeció la disponibilidad de la Iglesia de Santiago en estos momentos difíciles que viven los más necesitados de Renca: “Gracias a la alianza entre la Iglesia y la municipalidad, estamos abriendo espacios para atender a personas en situación de calle. Nos pone muy contentos por la necesidad que tenemos en nuestra comuna y porque acá, vemos que la Iglesia cumple su rol de estar con los que más lo necesitan y probablemente, donde estaría Jesús en estos tiempos que estamos viviendo”.

Andrea Gutiérrez de 41 años, es una de las beneficiarias del nuevo albergue habilitado en Renca: “Quiero dar las gracias a Dios porque puedo estar en esta iglesia y por la ayuda que nos han podido prestar. Yo estaba en situación de calle y ahora estoy feliz porque tengo una cama, un techo, un alimento. Le doy gracias a Dios, a los monitores, al obispo que acaba de venir, al alcalde. Agradecer a todos por lo que se ha hecho con nosotros, porque la calle está difícil. Ahora, ya no tengo frío, ya no tengo hambre y puedo recuperar todo lo que he perdido en algún momento”.

Jonathan Bravo de 37 años en tanto, agregó: “Quiero darle las gracias al Señor y a la comunidad por tenernos acá alojados, ya que estábamos en situación de calle. Para nosotros es una gran ayuda todo esto, ya que nos protege del Covid-19, que en estos momentos tiene fuertes demandas de fallecidos. Nos sentimos muy contentos de estar acá, de poder sentir esta ayuda, ya que nos sentíamos abandonados. Darle gracias a Dios, a la iglesia, a la alcaldía y a todos los que están en este proyecto. Estamos muy cómodos y bien atendidos”.

La casa de retiro Santo Cura de Arz perteneciente al Arzobispado de Santiago, estará abierta las 24 horas del día, los siete días de la semana y con una duración total de la estadía de las personas en situación de calle de tres meses. Además, entregará desayuno, once, cena y un kit de limpieza para todas las personas que ingresen al albergue.