La Sala de la Cámara de Diputados rechazó ayer jueves la idea de legislar el proyecto que otorga un reajuste de remuneraciones a los trabajadores del sector público.

Tras esto, el Ejecutivo deberá insistir con su texto en el Senado, en donde deberá obtener dos tercios de los votos para volver a la Cámara Baja. La iniciativa se considerará desechada si es rechazada por dos tercios.

Desde la oposición aseguraron que no respaldarían la propuesta del Gobierno, calificándola como mezquina. En este sentido, indicaron que los costos de la crisis derivada de la pandemia del coronavirus “no los pueden pagar los trabajadores”.

La propuesta consideraba un reajuste diferenciado, al 1 de diciembre de 2020. Para los funcionarios cuyas remuneraciones brutas sean iguales o inferiores a $1,5 millones, el aumento sería de 2,7% (equivalente al IPC acumulado a noviembre); en tanto que para quienes superaran dicha cifra, el incremento sería de 0,8%.