Paula Narváez fue proclamada esta tarde como la candidata presidencial del Partido Socialista (PS), luego de que fuera la única que inscribió su candidatura para participar de una primaria interna para elegir al abanderado.

En su discurso de proclamación, la exsecretaria de Estado declaró que “el socialismo democrático es una forma de entender la vida que trasciende generaciones, no debemos olvidar nunca que estamos aquí porque otros dieron su vida por la democracia, y estamos aquí también para que otros vivan mejor”.

“Permítanme subrayar esto y rendir un homenaje a quienes resistieron el período más oscuro de nuestra historia, para que hoy nosotros abramos esas anchas alamedas, por que ellos y ellas y con ellos y ellas estamos hoy aquí”, resaltó.

“No es casualidad que esta candidatura haya emergido desde las bases, desde un amplio espectro de mujeres socialistas empoderadas, que dijeron fuerte y claro: Nunca más sin nosotras. Esto es el signo más claro de los tiempos que vivimos”, agregó.

En esa línea, recordó que el estallido social “fue el ejercicio más grande y fuerte de unidad nacional, cuya expresión más concreta fue la realización del Plebiscito Constitucional, 8 de cada 10 chilenos y chilenas hicieron realidad uno de los más grandes anhelos históricos del socialismo democrático (…) una Constitución política nacida en democracia y emergida desde un órgano paritario e inclusivo, como no se ha visto en ninguna parte del mundo”.

“Hago un llamado a articular un trabajo de coordinación entre las candidaturas constituyentes, el partido y esta candidatura a la presidencia para actuar como una sola voz cada vez que sea necesario”, destacó.

Asimismo sostuvo que “no podemos hacer el simulacro de diálogo o la escucha cosmética, sino que la participación vinculante, porque eso es lo que nos exigen nuestros compatriotas y porque eso es lo que le corresponde a un pueblo maduro y a una democracia moderna”.

“El proyecto que estoy decidido a encabezar, se construye de abajo hacia arriba, en todo el ejercicio de nuestra candidatura y gobierno. Aspiro a que los próximos cuatro años sean el tránsito a formas cada vez más participativas del ejercicio del poder”, afirmó.

La candidata además dijo que “la derecha nos va a entregar un Gobierno debilitado, y la tarea de recuperación será ardua”. “Tenemos deudas de dignidad”, enfatizó.

Finalmente, aseguró que “sé que estaremos a la altura del desafío de este nuevo Chile que emerge”.

“Las y los socialistas bien sabemos cómo sentar en una misma mesa miradas diferentes para construir un futuro común. Hoy necesitamos cultivar esa virtud por el bien de Chile”, añadió.

“Necesitamos poner todos los puntos en común que tengamos como oposición para ofrecer un proyecto transversal de transformaciones políticas y sociales profundas, pero sostenibles en el tiempo. Gobernabilidad en el cambio social, eso es lo que ofrece el socialismo democrático”, indicó.