Como “complejo, pero provechoso” calificó la presidenta del Senado, Adriana Muñoz, el año legislativo que registró un aumento de más de un 50% en la actividad tanto de Sala como Comisiones, entre marzo y diciembre de 2020.

Asimismo adelantó que “si bien estaremos disponibles para avanzar durante febrero en los proyectos que sean necesarios, en marzo nuestra intención es poner en tabla los proyectos de género que hemos impulsado. El primero será aquel que asegura el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, a través de la prevención, sanción y erradicación de cualquier tipo violencia. Esta norma está en segundo trámite y se recibieron más de 500 indicaciones, por lo que hubo un trabajo exhaustivo”.

“Creemos que el esfuerzo que hemos puesto en emparejar la cancha en materia de género es positivo. Esta semana despachamos el proyecto que permite anteponer el apellido de la madre y el de acoso sexual. Eran normas que habían esperado mucho para avanzar”, reconoció.

EXIGENTE AÑO

La presidenta de la Cámara Alta insistió en el contexto particular que marcó el año legislativo cruzado por la pandemia por COVID-19.

“Pese a las condiciones que vivimos de pandemia, de tanta restricción, aforo, distancia física, nuestro trabajo no ha parado. Siempre habíamos tenido de marzo a marzo un promedio de 90 sesiones. Hoy, de marzo a enero contamos con 150. Hemos aumentado en más de un 50% el número de sesiones de Sala y hemos duplicado el número de horas de trabajo”, describió la titular de la Corporación.

En esa línea, manifestó que “hemos tenido un año exigente para responder a las múltiples necesidades (…) Siempre estamos disponibles para trabajar. En febrero muchos de nosotros estaremos atentos para avanzar en los proyectos que se pueda (…) El trabajo telemático ha sido algo positivo, descubrimos que podemos trabajar, por ejemplo, en las semanas regionales, podemos atender las comisiones o asistir a seminarios sin tener que trasladarnos. Eso nos permite optimizar la labor”.