El 14 de mayo de 2019 se registró un incendio en la escuela Héctor Carrasco Heldt, del sector Quidico, en Tirúa, que consumió 483 metros cuadrados, afectando a un sector importante del recinto. Hubo pérdida total de infraestructura y equipamiento, correspondiente a las áreas de cocina, comedores, oficinas, jardín infantil y servicios higiénicos.

Tras el hecho el municipio se desplegó para solucionar los asuntos administrativos y curriculares, además de la remoción de escombros y limpieza del terreno, para dar continuidad al proceso en enseñanza. Se utilizaron las salas y espacios que no fueron afectados por el siniestro e incluso se realizaron algunas clases en una sede vecinal del sector.

Un complejo panorama que mantenía a su comunidad escolar a la espera de una respuesta en torno a la reposición del inmueble, la cual llegó este martes con la firma del traspaso de 154 millones de pesos para levantar un nuevo recinto.

La firma del documento se concretó en la Intendencia del Biobío y contó con la presencia del intendente, Patricio Kuhn; el seremi de Educación, Felipe Vogel; el alcalde de Tirúa, Roberto Garrido; y dos representantes de los apoderados de la escuela.

“Tenemos la fortuna de estar en este momento cuando se concreta este traspaso y esperamos que sea un paso importante para los niños que allí estudian, que es el objetivo de todo“, afirmó el Intendente Patricio Kuhn.

El proyecto contempla la instalación de una infraestructura modular provisoria, de emergencia, de tal modo de cubrir las necesidades para el adecuado desarrollo de las actividades del establecimiento educacional. El seremi, Felipe Vogel, resaltó que “se da respuesta a una necesidad muy sentida por la comunidad del sector. Niños y profesores hicieron grandes esfuerzos por mantener el trabajo educativo y ahora que ya están los recursos la idea es que los trabajos se inicien a corto plazo y de este modo retomar las actividades presenciales, cuando las condiciones sanitarias así lo permitan”.

Actualmente la escuela cuenta con una matrícula de 145 alumnos y mantiene un índice de vulnerabilidad del 96%, de ahí la importancia de contar con un nuevo inmueble, así lo reconoció el alcalde de Tirúa, Roberto Garrido, quien indicó “estamos muy contentos porque ahora vamos a tener un recinto adecuado para poder iniciar las clases y la comunidad Quidicana va a estar contenta. Agradecemos a las autoridades por habernos recibido”.

El proyecto de $ 154 millones será financiado por el Mineduc y contempla un plazo de ejecución de 90 días para el retorno de los alumnos al establecimiento.