Adjudican sistema de peaje para la autopista AVO 1
Kapsch TrafficCom Chile será la empresa encargada de implementar esta solución tecnológica para el proyecto de Autopista Américo Vespucio Oriente (AVO 1), luego de adjudicar la licitación y firmar la semana pasada los contratos como proveedor de este servicio con la concesionaria.
Según detalla la descripción de la obra, se instalarán 21 pórticos de peaje de flujo libre en cada acceso de entrada y salida a la autopista, la que consta de 9,1 kilómetros de extensión, conectando las comunas de Recoleta, Huechuraba, Las Condes, Vitacura, La Reina y Ñuñoa.
Este proyecto, cuya fecha de entrega se estima para el primer trimestre de 2022, tendrá un impacto en las cerca de 500 mil personas que viven o se desplazan en la zona ya que, según los estudios realizados, aproximadamente un 80% de los conductores van a preferir la vía subterránea, descongestionando el tráfico en superficie.
La participación de Kapsch en el proyecto consiste en la instalación de los 21 pórticos de peaje, así como del back office para las operaciones y gestión de clientes, desde identificación de vehículos, estrategias de tarificación, facturación, gestión de infracciones, entre otros.
Diferente de otras autopistas urbanas en Chile, el sistema realizará la aplicación de cobros de acuerdo a la distancia realmente recorrida dentro de la vía mediante el uso de TAG.
Carlos Wiedmaier, vicepresidente de Solution Consulting de Kapsch TrafficCom en Latinoamérica, destacó que “el redireccionamiento del tráfico a túneles bajo tierra para disminuir los actuales niveles de congestión, accidentabilidad y contaminación, tanto atmosférica como acústica, sumado a los peajes de flujo libre significará un ahorro importante de tiempo para los usuarios, situando a Chile en uno de los países más avanzado de Latinoamérica en desarrollo e innovación de infraestructura vial”.
Si bien los peajes de flujo libre (Multi-Lane Free Flow – MLFF) son una tendencia mundial, tanto para autopistas como para áreas urbanas, su incremento se ha dado principalmente en países desarrollados como Estados Unidos, Australia, y Europa.
“En Chile estamos acostumbrados a este avance tecnológico que ha sido posible gracias a sus niveles de desarrollo y bancarización, pero aún muchos países de la región están apenas comenzando esta nueva etapa”, señaló Wiedmaier.